martes, 19 de abril de 2011

Gracias

Hace aproximadamente dos años que Ana Esteban y yo comenzábamos a escribir el guión para este audiovisual. Las líneas que definen la realidad es un tema que siempre me ha atraído mucho, ¿por qué y cómo hemos construido este mundo, esta sociedad y no otra?, ¿por qué y cómo normalizamos una serie de conductas y no otras? La realidad en la que vivimos y nos rodea siempre me ha parecido que tenía un punto de ficción, a pesar de su apariencia sólida, es muy frágil, tiene fisuras en las que podemos colarnos para hacerla girar y transformarla.
Esta es mi primera incursión en el mundo audiovisual y eso me dio una gran libertad a la hora de explorar sus posibilidades porque, sinceramente, desconocía sus límites, así que comencé a fusionar y mezclar diferentes recursos expresivos de la imagen: cómic, fotomontaje, cine mudo, cine de suspense, el diálogo entre la doble y triple pantalla... Claro, después llega la hora de la verdad, el de la realidad en la que vivimos y sus límites, uno de los primeros fue el de la financiación, que gracias a la subvención de la DGA y a los recursos técnicos y humanos que el Laboratorio Audiovisual puso a nuestra disposición, logramos esquivar. Pero este sería sólo el primer reto, luego vendrían muchos más, pero a este proyecto se une Conchi del Río tomando las riendas de producción, el realiador Iñaki Bernal, el actor profesional Rafa Campos, nuestra diretora de fotografía Beatriz Orduña, nuestro editor de imagen Álvaro Mazarrasa, nuestros ilustradores, animadores, compositores de música, maquilladoras, peluqueras, técnicos de luces, técnicos y editores de sonido... y así fuimos sumando fuerzas hasta completar un equipo de más de 40 personas que, juntos, nos hemos enfrentado a los límites de la realidad para traspasarla y transformarla, aportando nuestra creatividad y conocimientos,  consiguiendo que lo que no existía, exista. "La Nave" ha sido posible gracias al trabajo de un equipo estupendo, el mejor. El pasado 8 de abril en el Centro de Historia, llegaron los observadores, los espectadores, más de 200 personas dispuestas a ofrecerle su mirada a este cortometraje y darle, por fin, sentido a esta creación. Gracias.

Eva Villar

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